VISITA A LA LAGUNA DE GALLOCANTA

 El lunes 21 de noviembre, los alumnos y alumnas de 1º, 2º, 3º y 4º de educación primaria nos fuimos de excursión a la Laguna de Gallocanta.

A las 9:00 en punto ya estábamos todos y todas en el autobús, con el cinturón puesto y preparados para salir.

                                                 

La primera parada fue en la plaza de Tornos, allí habíamos quedado con David y Carmina, los guías que iban a estar con nosotros y nosotras toda la mañana.

Allí en la plaza nos pusimos a almorzar, y a correr un rato. El pilón de San Antón, fue un entretenimiento para subir y bajar.

Cuando terminamos nos subimos de nuevo al autobús, destino Berrueco. 

Allí, antes de subir un pequeño monte para poder ver la laguna entera y alguna grulla, nos explicaron de dónde vienen las grullas y hacía dónde van.

Comenzamos a subir la montaña, eso sí con las manos fuera de los bolsillos para no caernos y pisando bien el suelo para hacer fuerza y que no se nos llevara el viento.

                                                   

                              

                                 

                                 

                                    

                                    

Una vez en lo alto del monte, nos contaron una leyenda de un gigante.

Cuenta la leyenda...., que estaban todos los animales bebiendo agua de un pequeño lago, y se sintió como un terremoto, era un gigante que llegaba  a ese lugar, el gigante se llamaba Endorro, y se puso a beber agua hasta dejar el lago vacío, los animales que estaban por allí, le dijeron que no tenían nada para beber y se tendrían que ir de ese lugar.

Al gigante le dio tanta pena que empezó a llorar y una de sus huellas se llenó de lagrimas formando así la Laguna de Gallocanta.

Hablamos de la flora y la fauna que hay en el entorno de la laguna.

Ahora toca bajar, la bajada fue mucho mejor que la subida y con muchas menos quejas.

Volvimos a subir al autobús, pero para poco rato. Nos fuimos a Gallocanta para ver las grullas más de cerca, hicimos dos paradas: una a mitad de camino que había en un campo de cultivo y estaban comiendo, y la otra en el mirador de Gallocanta que estaban bebiendo agua.

Se acercaba la hora de comer, así que fuimos a coger el autobús, para ir al Centro de Interpretación de la Laguna. 

Una vez visitamos el centro, nos dejaron tocar las cosas que había por allí, sonidos, hacer puzzles, leer información,...

Tras la explicación, nos pusimos a comer para volver a nuestra casa, y descansar después de este paseo.

No vimos las 39.500 grullas que el jueves anterior decían que había, pero sí pudimos ver unas cuantas.